Ya lleva casi dos años en el mercado, pero Windows 7, el último sistema operativo de Microsoft, continúa cosechando éxitos de ventas en todo el mundo, alcanzando récords y demostrando que la compañía no se equivocó al apostar por el sucesor del fracasado vista.
En 18 meses, Windows 7 vendió 350 millones de licencias en todo el mundo, pasando por encima a las cifras conseguidas por las versiones anteriores de Windows y sacando a Microsoft de los números rojos que tuvo en periodos anteriores.
Pero a esas 350 millones de licencias vendidas, debemos sumar un número igual o mayor de copias ilegales instaladas en computadoras a lo largo de todo el globo. Hoy, el 21,5 % de los equipos utiliza Windows 7, siendo superado por Windows XP, presente en un 53,52% de las máquinas.
En información entregada por Microsoft, nueve de cada diez empresas que usan de su sistema operativo XP, están migrando a Siete, ello por la estrategia de mercado del gigante del software, cuyos nuevos productos no son compatibles con XP.
Así, para disfrutar de Explorer 9 o Windows Live Essentials, es necesario tener una computadora equipada con Windows Vista o Siete, por lo que muchos se ven obligados a pasar dicho sistema operativo, para poder disfrutar de los productos más nuevos.
Habrá que esperar si Windows 8, sistema que vería la luz el próximo año, contará con igual suerte, ya que, según filtraciones, sería radicalmente diferente a los SO que conocemos.
Fuente: Europa Press