En la época de A.I (antes de la Internet) los amantes de las historietas acudían ansiosos a los kioscos para ver si había llegado una nueva edición de sus cómics favoritos, siendo muchos los que se convirtieron en verdaderos coleccionistas de un arte que se niega a morir.
Para salvarse, decidió unirse al mundo de lo digital, llegando en masa a ocupar el sitial que nunca deberían haber abandonado, pero utilizando las tecnologías modernas, como el iPhone y Kindle, el dispositivo digital de lectura de Amazon.
La iniciativa se lanzó durante la comic-con, el evento más importante en el mundo de los cómics, y que se realiza año a año en los Estados Unidos. Allí se reúnen las empresas líderes del mercado de las historietas, prensa y fans, los que quedaron felices al saber que una pasión antes relegada al papel, podría acompañarles en sus gadgets preferidos.
Pero no crean que la tecnología llegará sólo a las historietas más nuevas, ya que los clásicos también contarán con un espacio en la versiones digitales, las que ya cuentan con un adelanto por parte del mismo Stan Lee, que lleva como título Time Jumper, con sorpresas como la incorporación de sonidos y otros elementos multimedia.