Muchos piensan que aquellos que se pasan horas ejercitándose en un gimnasio lo hacen por vanidad, cuando la verdad es que se trata de un acto desinteresado por ayudar al planeta. Bueno, quizás no, pero un establecimiento en Estados Unidos logró combinar ambas nobles intenciones.
¿Cómo? Fácil, ya que gracias a un innovador sistema, el gimnasio convierte la energía liberada por sus clientes al hacer ejercicios en electricidad, la que luego puede utilizarse para hacer funcionar los aparatos e iluminación del lugar.
El New York Sports Club, es pionero en utilizar el sistema patentado por la empresa Green Revolution, los que aseguran que con la cantidad de energía que se produce allí cada mes, es posible satisfacer el consumo eléctrico de una casa durante medio año.
Por ahora, el invento sólo funciona en las bicicletas estáticas, pero pronto podría extenderse no sólo a otros aparatos deportivos, sino que también a una serie de actividades humanas en donde se genere energía cinética, es decir del movimiento.
Ya sabes, la próxima vez que tu novia o amigos reclamen que les estás descuidando por ir a cultivar tu cuerpo al gimnasio, explícales que lo tuyo no es obtener abdominales marcados o una cola de ensueño, sino que entregar tu granito de arena por hacer del mundo un lugar más verde a través de energías alternativas.
Fuente: Yahoo Noticias